80 Normas económicas

emitidas durante la pandemia

¿beneficio o perjuicio?

 

Lucero Noemí Claros Torrico

 

Tras la llegada de la pandemia del Covid-19 al país, el Gobierno Central emitió más de 80 decretos y leyes referidas a la emergencia sanitaria, al menos ocho de las nuevas normativas legales están dirigidas a las grandes, pequeñas, medianas y microempresas. Sin embargo, las disposiciones no benefician al sector privado porque no ofrecen una inyección económica real, sostiene el asesor legal de la Federación de Entidades Empresariales Privadas de Cochabamba (FEPC), Dante Reyes.

Por su parte, el presidente de la FEPC, Javier Bellott, explica que para la conservación del aparato productivo es urgente implementar medidas de mitigación que permita que las obligaciones a corto plazo no destruyan las unidades productivas.

“Con las nuevas normativas, se ha pensado en las personas que acceden a créditos pequeños, en  la gente que no tiene muchos recursos, pensando

que la empresa privada tiene millonadas de dinero, tratando de dar equidad, pero no han pensado en la pérdida millonaria que genera día a día el no tener trabajando una empresa”, afirmó Reyes.

Entre las nuevas normativas se encuentran: 

  1. Decreto Supremo 4298 del 24 de julio de 2020 que tiene por objeto establecer incentivos tributarios para la reactivación económica; y promocionar la creación de nuevas empresas mediante un sistema tributario de apoyo al
  1. Decreto Supremo 4249 del 28 de mayo de 2020 que tiene por objeto la prórroga del plazo de vencimiento para la declaración,  determinación y pago del Impuesto sobre las Utilidades de las Empresas – IUE, con cierre al 31 de diciembre  de 2019.
  1. Decreto Supremo 4216 del 14 de abril de 2020 que establece el Programa Especial de Apoyo a la Micro, Pequeña y Mediana Empresa, y el Plan de Emergencia de Apoyo al Empleo y Estabilidad Laboral a las empresas legalmente.
  1. Decreto Supremo 4218 del 14 de abril que regula el Teletrabajo como una modalidad especial de prestación de servicios caracterizada por la utilización de Tecnologías de la Información y Comunicación – TIC en los sectores público y privados.
  1. Ley 1294 del 1 de abril de 2020 de diferimiento de pagos de créditos y reducción temporal del pago de servicios básicos.

Mayor inyección económica 

Para reducir el impacto negativo de la economía de  las  empresas  formalmente   establecidas   de Cochabamba,  se  trabaja  en  un  proyecto  de ley que tiene por objeto solicitar créditos o financiamiento bancario mayor al que se ofrece actualmente y con menor interés (de hasta 2 por ciento) y diferimiento.

“Nos seguimos endeudando y esto va a ser una reactivación de aquí a 10 años, y trabajar 10 años para pagar una deuda que se está generando en 6 meses de pandemia no es correcto ni justo.

El tiempo es muy corto, de dónde vamos a generar dinero cuando no hay personal, gastamos el dinero pagando beneficios y recursos”, explica Reyes.

Asimismo, considera que los intereses y el pago de impuestos son “otro golpe” a  la  economía  del sector formalmente establecido. “Con el proyecto, podríamos tener una buena inyección y salir adelante y recuperar lo que se ha perdido”, sostiene.

“Tener todo previsto” 

A efecto de la pandemia, se rescindieron muchos contratos por la falta de una cláusula, una “hueca jurídica que tiene que estar  prevista  en  todos los contratos de ahora en adelante”, sostiene el asesor.

Se debe “tener todo previsto” ante un posible terremoto, desastre natural, pandemia, epidemia, como parte de una política de reactivación del sector privado. Al rescindir contratos la única que pierde es la empresa porque no está generando fuentes de trabajo, ni recursos”, indica Reyes.

Conflictos sociales

 Pese a contar con normativas que buscan ayudar a reactivar la economía del sector afectado por las restricciones que generó la pandemia, existen elementos que provocan efectos negativos que aquejan al empresario como los conflictos sociales que estallan en el departamento, bloqueos, e incluso feriados departamentales.

Durante los primeros  meses  de  la  pandemia,  el 80 por ciento de las 4.000 empresas de Cochabamba reportaron problemas económicos por las medidas asumidas para frenar el avance del Covid-19, principalmente los que prestan servicios.

Asimismo, la FEPC calculó una pérdida superior a los 430 millones de bolivianos para su sector    y más de 2.400 millones para toda la región durante los 12 días de bloqueo por parte de la Central Obrera Boliviana (COB) y sectores afines al Movimiento Al Socialismo (MAS).

Finalmente, Reyes sostiene que el apoyo al sector privado debe evidenciarse con acciones inmediatas para afrontar la crisis generada como consecuencia de la pandemia.